
Desde que somos pequeños siempre nos han intentado inculcar que la historia de la humanidad es muy importante, ya que es nuestro pasado.
Sin ella, nosotros no nos encontraríamos aquí, ni siquiera existiríamos
Y como si fuese una muestra de honor, nos obligan a estudiarla y a memorizarla desde nuestros primeros años de escolarización
Al principio solo son datos generales, fáciles de aprender, como el autor de La
Odisea que es Homero, o el descubrimiento de América en 1492
De pronto nos obligan a aprendernos datos mucho más exactos y complicados, como el nacimiento de Shakespeare el 26 de abril de 1564 o el nombre del inventor de la imprenta que es Johannes Gutenberg

En cuanto nos lo hemos memorizado todo, nos embuten miles de datos de fechas y nombres tan enrevesados que acabamos por odiar la historia, porque todo ese exceso de información nos abrume y nos acaba aburriendo de tal manera, que simplemente, nos deshacemos de ella
Nosotros preferimos sentarnos frente al ordenador a ver una serie, o escuchar música, hablar con nuestros amigos… hacer cosas que no impliquen tener que sentarse serio y aprenderse de memoria cosas que, pensamos, no nos sirven para nada actualmente
¿De qué nos va a servir saber quien fue el general que mandó lanzar la bomba atómica en Japón? ¿O quien era el rey con el que luchaba Juana de Arco?
La cultura general está bien, por supuesto, pero hay algunas cosas que ya no se van a repetir y no es necesario que nos aprendamos fechas exactas…
Por otro lado está la política, que junto con la historia, nos aburre. Aún somos demasiado jóvenes como para que nos interese eso, ya habrá tiempo de madurar y de preocuparnos de cosas como esas
¿Y cuando sabremos que estamos preparados para afrontar esa responsabilidad?
Un día como cualquier otro vemos que en la web donde nos descargamos animes hay una serie nueva; o viendo videos en el youtube encontramos uno sobre una serie que no conocemos; o revisando el DA nos topamos con una pareja de rubios portando banderas; o simplemente una amiga nos llama ilusionadísima pidiéndonos que nos veamos un anime

Cada experiencia es diferente, pero todas poseen la misma palabra
Hetalia
Cuando conocemos el significado del título nos quedamos un poco traspuestos. Una cosa es llamarse como un ingrediente del ramén y otra muy distinta es insultar literalmente a un país.
Pero lo que más nos sorprende es que los capítulos no duran ni 5 minutos y el manga son puras tiras cómicas
Eso solo puede ser una serie chorra que no va a llegar muy lejos, pero aún así, nos descargamos el primer episodio, total, 4 minutos de video no ocupan tanto.
Cuando nos hemos dado cuenta, ya llevamos 10 capítulos vistos y estamos muertos de risa sobre el teclado del ordenador. Y lo peor de todo, es que al día siguiente en clase empezamos a tararear el ending.
De acuerdo, la serie tiene enganche, así que en una semana ya nos hemos terminado de leer y de ver todo cuanto hay traducido
La carpeta de Hetalia en nuestro escritorio ha engordado más en dos días que la de Naruto en cuatro meses, por no hablar que la canción que más se escucha en nuestro cuarto es el Marukaite
“Estás estudiando mucho últimamente, así me gusta, estoy orgullosa de ti”
Esa frase de tu madre durante la cena te resulta extraña, realmente no has estado estudiando, pero sientes la necesidad de saber más sobre el yanqui de las hamburguesas y el come patatas
Los nombres de Francia, Rusia y China adquieren un significado totalmente distinto para ti, ya que eres incapaz de ver una rosa, una tubería o un panda sin ponerte a señalarlo riéndote como un loco
Cuando vas por la calle y escuchas el nombre de Arturo, sonríes como un pánfilo imaginándote que quien conteste tendrá unas cejas horribles y que a las 5 saldrá corriendo para irse a tomar el té
Si tu madre te manda a hacer la compra, le pides un poco más dinero para poder comprar tomates, y durante el camino de regreso a casa te la pasas cantando el Bouno Tomato
Las clases de historia y geografía se vuelven una tortura para ti, no porque te disgusten, en absoluto, es porque te pasas la mitad del tiempo copiando como un poseso y la otra conteniéndote las risas
Esta nueva serie es genial, jamás te has reído tanto y mucho menos aprendido todos los nombres de los personajes tan rápido, y no tardas nada en recomendársela a todos tus amigos
Te descargas la última tira traducida y comienzas a leerla entusiasmado, cuando a mitad de esta te das cuenta que ya no puedes ver.
Estás llorando.
Eso si que no lo habías planeado, viendo Hetalia nunca te había pasado… pero un nuevo sentimiento crece dentro de ti.
Lo que estás viendo no son simples dibujos animados, son hechos reales.
Todo lo que sucede en cada capítulo ha sucedido de verdad
Cuando alguno de ellos llora, en su momento, miles de personas también lo hicieron, porque lo que está sufriendo el personaje, lo sufrió su país entero
Cada error de calculo no solo le hizo un rasguño a un país, si no que mató a toda su gente, causó a veces unos daños irreparables que muchísima gente tuvo que pagar
Ahora ya no ves Hetalia con los mismos ojos, ya no es una simple serie con la que te ríes después de las clases, es algo que te está cambiando
De pronto te sorprendes viendo la noticias con tu padre antes de cenar; recogiendo todos los periódicos gratuitos del metro y leyéndote, en vez de las tiras cómicas, las noticias internacionales; dejas de pensar en el fútbol como un deporte idiota y te sientes con ganas de animar a los equipos de todos los países; no hay ni una sola palabra del profesor de Historia que no hayas escrito en tu cuaderno, e ilustrado con el dibujo de su respectivo país; sintonizas en la radio, no Kiss FM, si no un programa sobre economía y política…
De la noche a la mañana te has vuelto patriótico
Ahora te interesa todo lo que te rodea, tu país, tu continente, los gobiernos que en ellos ahí, la historia antes acontecida… todo cobra un nuevo significado para ti
Ya no estás memorizando fechas y nombres que ni te vienen ni te van.
Estás informándote sobre como le va a Yekaterina con sus deudas, si a Alfred se le han vuelto a cruzar los cables con tanta hamburguesa y quiere otra guerra, si Heracles ya ha recibido una ayuda para poder repoblar sus bosques, si Gupta ha vuelto a tener otro atentado, si Matthew ganó el último partido de hockey, si Yao sigue con su proyecto de descontaminar los ríos de su país…
Ya no son meros territorios lejos de ti que no has visitado nunca, son personas
Son gentes con sentimientos, con experiencias, con historias como la tuya.
Ellos también se han reído, han llorado, se han sentido traicionados, han conocido el miedo y la soledad, han sido abrazados y han besado… ellos también han vivido
Con el nuevo curso escolar dejas a todos anonadados cuando te oyen pronunciar algunas palabras en alemán y en ruso, e incluso te atreves a escribir tu nombre en chino, pero es que si vas a rolear como Hungría o Italia quieres conocer un poco sus idiomas
Tu lista de contactos ha crecido de una manera impresionante, ya que gracias a los livejournal y los foros de rol sobre Hetalia has conocido a gente de todo el mundo.
¿Quién te iba a decir que una de tus mejores amigas iba a ser de Polonia? ¿O de Argentina? ¿O de Dinamarca?
No eres una persona totalmente formada, aún no has tenido tiempo de hacer grandes cosas y poder decir que tu nombre será recordado cuando te mueras, pero eres alguien a quien le interesa saber que está pasando en el mundo y te mueres de ganas de poder cambiar las cosas que no te gustan; los idiomas no son un impedimento para poder conocer a gente y mucho menos entablar una relación con ellas; los prejuicios no son algo que forme parte de tu persona…
¿Quién te iba a decir que ibas a madurar un poquito viendo una serie llamada Hetalia?